Es común ver a perros y gatos rascarse ocasionalmente, pero si tu mascota insiste en rascar zonas específicas como las orejas, el cuello o la base de la cola, podría estar enviándote una señal importante: algo le está molestando. En este artículo te explicamos las posibles causas detrás de este comportamiento, cómo identificar el problema y qué puedes hacer al respecto.
🚨 ¿Por qué se rasca tu mascota?
Existen varias razones por las que tu perro o gato puede estar rascándose frecuentemente, especialmente en ciertas zonas:
1. Parásitos externos (pulgas, garrapatas, ácaros)
Una de las causas más comunes. Las picaduras de pulgas suelen generar irritación y comezón, especialmente en el cuello, base de la cola y detrás de las orejas. Las garrapatas también prefieren esconderse en áreas cálidas como el cuello, mientras que los ácaros (como los responsables de la sarna o la otitis externa) afectan sobre todo los oídos.
2. Alergias
Las mascotas pueden desarrollar reacciones alérgicas a alimentos, al polvo, al polen o incluso a productos de limpieza. Estas alergias suelen manifestarse en forma de picazón localizada, enrojecimiento y a veces pérdida de pelo.
3. Infecciones en la piel o los oídos
Las infecciones bacterianas o fúngicas pueden aparecer cuando hay humedad constante (por ejemplo, después del baño o si tiene orejas caídas), generando picazón intensa y mal olor, especialmente en las orejas.
4. Cuerpos extraños o heridas
Una espina, una astilla o un pequeño rasguño en el cuello u orejas también puede provocar que el animal se rasque repetidamente para aliviar la molestia.
🔍 ¿Cómo detectar la causa?
Observa con atención. Algunos signos que te ayudarán a identificar la causa:
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Pulgas o garrapatas: Revisa el pelaje y la piel. Busca pequeños puntos negros (excremento de pulga) o parásitos visibles.
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Alergias: Picazón constante sin evidencia de parásitos, enrojecimiento o zonas inflamadas.
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Infección en oídos: Sacudidas constantes de la cabeza, mal olor, secreción o costras.
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Heridas o espinas: Enrojecimiento localizado, costras visibles o reacciones al tacto.
En todos los casos, si la causa no es evidente o los síntomas persisten, lo mejor es acudir con un veterinario para un diagnóstico preciso.
✅ ¿Qué puedes hacer?
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Limpieza regular: Mantén el área de orejas y cuello limpia, especialmente en razas con orejas largas o mucho pelo.
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Uso de productos antiparasitarios confiables:
Si el problema son parásitos, aplica un tratamiento adecuado. Una excelente opción son los productos de la línea Frontline, reconocidos por su efectividad para eliminar y prevenir pulgas y garrapatas en perros y gatos.Puedes encontrar presentaciones en pipeta o spray que ofrecen protección continua por varias semanas.
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Revisiones frecuentes: Revisa el pelaje y la piel de tu mascota al menos una vez por semana.
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Consulta veterinaria: No automediques. Un veterinario puede hacer una prueba de raspado de piel, cultivos o exámenes de oído para identificar el origen del problema.
🐶 En resumen
Si tu mascota se rasca constantemente en el cuello o las orejas, no lo ignores. Puede tratarse de algo tan simple como una pulga o tan serio como una infección. Observar, actuar pronto y usar productos confiables como los de la línea Frontline puede marcar la diferencia en la salud y bienestar de tu peludo.